“Autonomía Alimentaria. Una mirada desde la sostenibilidad del proceso social”. Corporación Compromiso. CEAAL Colombia

Por: Angélica Rivero.

“Aspiramos a un proceso alimentario establecido en relaciones armónicas con la sociedad, la naturaleza y las generaciones venideras.”

Sonia Rincón Monsalve, Agrónoma de Corporación Compromiso.

 

Se han cumplido 4 años desde que la Corporación para el Desarrollo del Oriente Compromiso empezó un trabajo de intervención en la comunidad campesina de San Vicente de Chucurí con el proceso que denomina: Autonomía Alimentaria. Este resultó de un análisis del contexto de campesinos y campesinas que luego, dirigió el planteamiento de acciones pedagógicas, con enfoque de Educación Popular, con el fin de promover transformaciones que motiven la permanencia con autonomía en el territorio, así como el reconocimiento del campesino como actor social, económico y político.

Cada año se ha planteado un proyecto que constituye una etapa de todo este proceso. Elizabeth Martínez, coordinadora de la Línea Rural, que es la responsable del desarrollo del mismo, asegura que “para este último año el enfoque principal fue la sostenibilidad y para ello, entre otras acciones, nos concentramos en fortalecer los colectivos conformados y sus aprendizajes”.

Colectivo Semillas en Resistencia

Son tres los colectivos a los que se hace referencia: Colectivo de Semillas llamado Semillas en resistencia, que está integrado por campesinos que cumplen la valiosa tarea de cuidar, conservar y multiplicar las semillas nativas; Colectivo de Comercialización, Eco-mercado El Rebusque Campesino, a través del cual los campesinos y campesinas logran comercializar los productos que cosechan; y finalmente, Colectivo de comunicación, Voces Campesinas, quienes haciendo uso de la radio comunitaria difunden información sobre el campesinado y el territorio a los Chucureños.

Recientemente se celebró la clausura de este proyecto, un evento realizado en el área urbana del municipio. Fue una jornada de un día completo dedicada a resaltar las acciones y la labor de los campesinos en el proceso, se contó con la asistencia de toda la comunidad vinculada, funcionarios de la Secretaría de Agricultura, un delegado de la Iglesia, un representante de la Emisora San Vicente Stereo y por supuesto, algunos actores de la Corporación Compromiso.

Fue Sonia Rincón Monsalve, coordinadora del proyecto, quien se encargó como anfitriona de presentar toda la ceremonia, la bienvenida a los asistentes la realizó la directora ejecutiva de la Corporación, Nelly Sofía Valderrama, y Elizabeth Martínez, y se contó con la intervención de Angélica Hernández, trabajadora social y educadora popular en el proceso; pero fue maravilloso que Leydi Marcela Prada, campesina y miembro de los colectivos de Comercialización y de Comunicación, solicitara la palabra para afirmar, entre otras cosas, que: “Podemos ser sostenibles, trabajar orgánicos y con principios agroecológicos”.

De esta manera, se daba la introducción al segundo momento de la ceremonia, un espacio dedicado a resaltar la creatividad y destrezas de algunos campesinos quienes crearon, en el transcurso del proceso, nuevas técnicas que mejoran las prácticas de siembra y su economía, a estás se les llamaron Innovaciones Campesinas, en total son 13 y cada una fue presentada por sus creadores ante los asistentes.

Fertirriego, Huerta bajo cubierta, Reciclando para cosechar, Huerta elevada y Chocolate Buena Vista son algunas de esas innovaciones. Jorge Eliecer Díaz, quien junto a su madre doña Alcira Martínez, desarrollaron un método para hacer lombricultura y constituirla como una forma de ingreso económico al hogar, compartió que: “Lo más bonito de todo el proceso ha sido la comercialización” resaltando que pretende continuar con esta práctica que nació con el proyecto.

Innovación: Lombricultura

 

Por su parte, Abel Reyes quien desarrolló la Huerta bajo cubierta, se refirió así a la oportunidad de compartir al público su innovación: “Es una experiencia muy buena, ya que mis compañeros se llevan esa idea, pues todos tenemos el mismo problema de que el hielo nos quema las plantas cuando están tiernitas o apenas germinando; yo, sí voy a continuar sembrando”.

Después de esto se dio paso para un compartir, se trató del intercambio de comidas realizadas con los productos de las huertas de los campesinos, un momento más para evocar la importancia de las huertas en las familias.

Graciela Caballero señaló que el aprendizaje más valioso obtenido hasta el momento ha sido “la huerta, porque nosotros en mi finca no teníamos, y todo lo comprábamos; pero ahora con el acompañamiento de Compromiso, tenemos la huerta y la seguimos conservando… comemos sano, porque a todo lo que sembramos no le echamos químicos.” Y finalizó aseverando que: “Nosotros tenemos que seguir, porque es una buena enseñanza que nos han dejado y no tenemos que dejarla acabar”.

Para continuar con la ceremonia, se llevaron a cabo las exposiciones sobre cada uno de los 3 colectivos antes mencionados, así como del Semillero Yariguíes del que hacen parte jóvenes en formación de defensa de su territorio y permanencia en el mismo.

Se debe destacar que todo este proceso lleva inmerso el objetivo de potenciar liderazgos en la defensa del agua, los acueductos comunitarios y la defensa del territorio mismo. Desde las acciones en la conservación de semillas, las nuevas y mejores técnicas de siembra, la comercialización en el Eco-mercado, hasta la comunicación popular a través de la radio, son acciones que fortalecen la convicción contra los proyectos extractivistas de carbón que causan la destrucción de los ecosistemas y que terminan por expulsar a las familias campesinas del territorio.

Comunicadora popular cubriendo la clausura

 

Rosa Yazmín Sinuco, integrante del Colectivo Voces Campesinas, aseguró sobre la clausura que tiene sentimientos encontrados, pero sobre todo “hay un sentimiento de empoderamiento, de querer seguir en el territorio, de querer seguir incidiendo. Yo creo que el colectivo de Voces Campesinas es un proceso que es de nosotros, aunque la Corporación Compromiso fue pionera en dejarnos este querido proyecto, nosotros nos tomamos la iniciativa de decir sí queremos hacerlo, porque es muy bonito tener en el territorio campesinos que cuenten lo que está pasando... Yo resalto el compromiso de la Corporación por querer que nosotros nos empoderemos en el territorio”.

Por su parte, la profesional Angélica Hernández, subraya que la sostenibilidad “depende mucho de las capacidades instaladas en el territorio con el proceso de la Escuela Campesina, con las habilidades y fortalezas que tienen los participantes para ejercer sus diferentes liderazgos”, aseguró que en la Corporación “nosotros le apostamos a que tanto mujeres, como hombres, niños y jóvenes se crean su rol… y se empoderen de todas esas acciones que ellos realizan. La sostenibilidad; además, “depende del amor, dedicación y paciencia de la comunidad, depende de las familias”.

María del Pilar Cepeda, miembro de los colectivos Semillas en resistencia y Eco-mercado, dijo que durante el proceso ha obtenido un aprendizaje que tiene que ver también sobre “reconocerse a uno mismo… a no sentirme menos que los demás, y a aprender a expresarme en diferentes lugares en los que he podido estar”. Y terminó diciendo que “a futuro, me veo continuando en el proceso y apoyando a mis compañeras que sigamos realizando estas actividades, quiero ser parte de esa vocería de mis compañeras”.

Innovación: Recuperación de papas nativas

 

Para la jornada de la tarde, se realizó un reconocimiento económico a las 13 innovaciones, resaltando que todas estas iniciativas se consideran importantes y necesarias en el proceso de Autonomía Alimentaria que se queda en el territorio; la autonomía vista desde la “autodeterminación de las formas de alimentación por parte de sujetos sociales, donde la alimentación se reconoce como un factor clave que constituye la identidad de una comunidad”, es así como Sonia Rincón definió este concepto gracias a su experiencia en trabajo con comunidades.

Finalmente, se hizo la entrega de los certificados a cada uno de los participantes de los procesos de formación en los que se desempeñaron, un espacio para reconocer la dedicación de cada campesino y campesina durante este año y mencionarlos con nombre propio sobre el rol que han adquirido en su comunidad: Custodios de semillas, Promotores de la comercialización alternativa, Comunicadores populares, Productores en transición agroecológica y miembros del Semillero Yariguíes.

Entrega de certificaciones

Para cerrar, algunos asistentes recibieron obsequios de parte de Abonar, quienes proveen los diferentes insumos para las huertas. Y así, los campesinos y campesinas de San Vicente de Chucurí se llevaron en sus manos las capacidades para cumplir sus deseos manifiestos de sostener el proceso. 

Artículo publicado originalmente en Corporación Compromiso